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El Ayuntamiento de Sopela ha implementado una iniciativa para mejorar la seguridad vial en la calle Ingestabaso: la instalación de un radar pedagógico. Este dispositivo tiene como objetivo concienciar a las y los conductores sobre las velocidades en la vía. Destaca por su carácter sostenible, ya que se alimenta exclusivamente de energía solar. Con esta medida se pretende aumentar la seguridad vial y peatonal en dicha calle, y mejorar la calidad de vida, tanto de vecinos y vecinas como de sopeloztarras que acceden a la zona de playas.
No es el primer radar pedagógico que se instala en Sopela. Durante el 2023 se ubicó un dispositivo de este tipo en la calle Olabide, por tratarse de un punto de gran tránsito hacia el nuevo hospital de Urduliz. Con el nuevo curso escolar, este radar pedagógico fue trasladado a las calles Gatzarriñe y Urgitxieta en Larrabasterra, una zona con idéntica problemática de exceso de tráfico y velocidad.
Cabinas en 4 puntos
Estos radares pedagógicos no han sido la única actuación en materia de control de velocidad en el municipio. Tras la correspondiente licitación y adjudicación, en el 2023 se han implantado cabinas en 4 puntos de gran afluencia de vehículos, concretamente, en Olabide, Sabino Arana y Akilino Arriola.
Control del tráfico y velocidad
Desde el consistorio, se afirma que “estas medidas responden a la necesidad alarmante de controlar el tráfico y las velocidades de los vehículos en nuestro municipio”. Y es que son constantes las quejas sobre los excesos de velocidad y aumento del tráfico en diferentes puntos de Sopela, debido a al crecimiento de nuestro municipio y de toda Uribe Kosta. “A falta de variantes de tráfico adecuadas, Sopela sigue siendo un municipio de paso, nuestras carreteras soportan gran parte del tráfico comarcal, y nuestra prioridad es garantizar la seguridad y bienestar de las personas”, destacan.
En este año 2024 se adquirirá e implantará una quinta cabina que dará cobertura a la calle Gatzarriñe en las inmediaciones de la Ikastola Ander Deuna, como respuesta a las quejas reiteradas de exceso de velocidad en dicho vial. Del mismo modo, se estudiará la posibilidad de trasladar el radar de Akilino Arriola hacia el Hogar del jubilado y la cuesta de la calle Iberre.